Puntuación: 9/10
Shepherd Moons es el tercer álbum de estudio de la cantante irlandesa Enya. Es uno de los mejores discos de new age de los noventa y de todos los tiempos. Su publicación fue un gran éxito, vendiendo hasta el día de hoy trece millones de copias. La fama del álbum fue tal que varias canciones, como «Book of Days» o «Ebudae«, fueron utilizadas en películas producidas en esa época.
Este disco se caracteriza por su música relajante y meditativa (elementos esenciales del género new age), la cristalina y etérea voz de Enya, la suavidad de las composiciones y las numerosas superposiciones de voces y sintetizadores que crean un efecto simplemente magistral de espiritualidad e instrospección.
El álbum es una de las cumbres musicales de Enya, que tras este trabajo no volvió a sacar nada parecido en sonido y calidad. No sobra ni una canción (algunas, como «Caribbean Blue», son de las más reconocidas de la cantante) y cada una de ellas tiene un increíble y contenido lirismo en su música.
El CD está compuesto por doce temas, siendo el primero el que le da nombre al álbum: «Shepherd Moons». Una canción muy relajante, con varias voces a modo de coro y un piano que armoniza perfectamente con la melodiosa voz de Enya. De los mejores temas del disco.
El segundo tema es «Caribbean Blue», uno de los más conocidos de la irlandesa. Es una canción muy orquestal, con sintetizadores que emulan instrumentos de cuerda y un teclado que imita a un clave. Una composición bellísima y muy nostálgica.
«How Can I Keep From Singing? es una canción más relajada y lenta que la anterior, donde Enya demuestra sus dotes vocales, siendo la incondicional protagonista de este tema, (mientras en las otras dos todos los elementos tienen igual importancia), sólo acompañada de un sintetizador.
«Ebudae» es un tema cantado en gaélico que recuerda a la música celta, pero con las características del new age (teclados sutiles, voces suaves creando atmósferas etéreas…). Este es uno de las pocas canciones en las que hay percusión.
«Angeles», como indica su nombre, evoca imágenes místicas y espirituales, pero no necesariamente relacionadas con religión. En este tema podemos escuchar una pequeña intervención de clarinete. Una bonita y muy relajante canción.
«No Holly for Miss Quinn» es una pieza instrumental de piano que sirve de puente entre la primera parte del disco y la segunda, pues se encuentra más o menos hacia la mitad del CD. Es una hermosa composición llena de matices pianísticos.
«Book of Days» es una canción alegre con piano, percusión y una sección orquestal que refuerzan la voz de Enya durante todo el tema. Originalmente la letra fue fue escrita en gaélico, pero es cantada en inglés.
«Evacuee» comienza haciendo un anticipo de lo que será la décima pista del álbum. A continuación escuchamos lluvia cayendo y diversos instrumentos de viento metal (trompetas, trombones, tubas…) anunciando el tema principal de la canción. Tras esto empieza la canción propiamente dicha, que sigue en el estilo y calidad de las anteriores.
«Lothlórien» es otra pieza instrumental de piano. El título de la canción hace referencia a un bosque de la Tierra Media dentro de la obra El Señor de los Anillos, de J. R. R. Tolkien. Este tema evoca perfectamente el espíritu de la región descrito en la obra.
«Marble Halls» es una versión del aria I Dreamt I Dwelt In Marble Halls, de la ópera romanticista The Bohemian Girl, compuesta por Michael William Balfe en 1843. La adaptación de esta pieza de música clásica está llevada a cabo de forma notable (la maravillosa voz de Enya también ayuda en este aspecto), siendo uno de lo temas más ricos, musicalmente hablando, de todo el álbum.
«Afer Ventus» sigue con la instrumentación seguida en «Book of Days» (piano, sintetizadores imitando instrumentos de cuerda…). Se añaden a la voz de Enya diversos efectos con eco, que le dan al tema un aire entre abstracto y vaporoso.
La última canción del disco es «Smaointe…», cantada en gaélico. Es el tema que más se acerca a la música celta, pues se incluye entre los instrumentos una gaita irlandesa, tocada por Lyam O’ Flynn, uno de los gaiteiros más grandes de todos los tiempos. De esta forma tan suave y reposada acaba esta maravilla de CD, de escucha obligada para cualquier amante del new age.
Para finalizar, remarcar lo que ya se ha dicho, que Shepherd Moons es un gran álbum y que ha pasado a ser una obra emblemática dentro del new age y también dentro de la música de los noventa. Una obra maestra de la música.
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